Sin duda de lo mejor que pasó en 2020: tener la posibilidad de ver (por fin) el show de Derek DelGaudio dirigido por Frank Oz: In and Of Itself. Ya he hablado al respecto en varios posts, pero a diferencia del resto, ahora si viví la experiencia.
O al menos la que propone el filme, con la cual me quedo corto de adjetivos para describirla.
A principios del año pasado DelGaudio anunció que liberarían el show en formato documental en el festival SXSW, lo cual se pospuso debido al coronavirus hasta mediados de noviembre, al final fue estrenado en un autocine y también en formato virtual. Ahora mismo está en iTunes y a partir del 22 de enero, en la plataforma Hulu.
Ahí estuve, viendo el show desde casa y aplaudiendo de pie secándome las lágrimas en los ojos el final. Y al mismo tiempo sin saber exactamente por qué: tal vez porque el mensaje te toca el corazón, por ver lo que es posible lograr con un arte como la magia, por la belleza que encierra esta experiencia llena de detalles asombrosos. Porque la magia que vives en In and Of Itself no es un truco.
Sólo para que se antojen, este es el trailer:
Grabaron varios de los más de 500 shows presentados en el Daryl Roth Theatre en Nueva York para lograr este documental ganador en varios festivales importantes, además combinan las imágenes del espectáculo con animaciones que complementan la experiencia. Y al frente de todo, en la silla de director estuvo, al igual que durante las temporadas en vivo: Frank Oz, una persona clave de la que hablaremos más adelante.
Y ahora la parte complicada: contarles de qué se trata y por qué deberían verlo. Haré mi mejor esfuerzo:
Se trata del intento de Derek DelGaudio de responder ¿quien soy? y deberían verlo porque, hablando específicamente de magia, es para mi lo mejor que se ha producido en los últimos años, y seguramente tan importante como cuando David Blaine salió en televisión vestido de camiseta, jeans y tenis a hacerle magia con cartas a la gente, o cuando David Copperfield desapareció la Estatua de la Libertad. Esto, para mi, es un punto de giro.
Bueno, el propio Blaine lo dice: «Derek isn’t just rising the bar, he’s moving the whole stadium. He’s changing the game, and it’s exhilarating to watch» (Derek no sólo subió el nivel, movió toda la escena. Cambió el juego y es muy emocionante verlo). Pues se trata de algo completamente diferente a lo que esperas ver si piensas que se trata solamente de un show de magia muy bueno.
No es un show de magia, o tal vez, porque hay varios efectos que hacen parte de la obra, pero hay una magia mucho más poderosa: el conectar con la gente a un nivel tan profundo que logra cuestionarse de manera personal, una magia que sucede dentro de cada uno, y es diferente para todos. O es un monólogo personal, una obra de arte moderno… lo único cierto, y en lo que tal vez sea lo único en lo que todos estaremos de acuerdo al hablar de In and Of Itself, es que no es posible definirlo, ponerle un nombre, porque se trata precisamente de la identidad.
Por eso después del título del show se lee Identity is an Ilusion (la identidad es una ilusión), el show gira al rededor de la catarsis personal de Derek DelGaudio al intentar definir quien es, y al mismo tiempo tu también vives algo parecido.
Es el trabajo de un verdadero artista: en el caso de DelGaudio es tener algo que decir, hacerlo a través de la magia y conectar con la razón y el corazón de las personas.
Y la consecuencia no puede ser otra que el éxito reflejado en los números: es uno de los espectáculos más exitosos en la historia de Broadway al recaudar más de 7 millones de dólares en taquilla durante las 72 semanas que estuvo al aire; recibió las mejores críticas de portales especializados, y elogios de celebridades y especialistas en la materia.
Para llegar ahí hay un camino largo, de mucho trabajo y en muchos casos, oscuro y tormentoso.
Pero además de suerte, y ahí es donde entra el director: Frank Oz. Porque ¿cuál es la posibilidad de que él y DelGaudio se conozcan (hace relativamente poco tiempo) y luego le proponga ponerse al frente del show? Y que acepte.
Tener a un cineasta como Oz como director es un lujo y una ficha que tuvo mucho que ver en el éxito pues una persona con una visión y sensibilidad únicas para contar historias. Mejor dicho, vean esta entrevista con ambos durante la temporada en Nueva York:
Y su aporte es tan importante como el del mismo protagonista o el de Glenn Kaino, el productor artístico que tiene una larga carrera junto a DelGaudio que vale la pena conocer por medio de su libro.
Al final, la enseñanza, al menos en mi caso como mago es darle más importancia la mensaje: tener algo que decir. No tiene que ser en Broadway, no tienes que tener un director increíble, hacer millones de dólares o los efectos más complejos y originales. Un mensaje.
También el comprometerse con eso. Por ejemplo, a excepción de sus actuaciones junto a Luis Piedrahita en El Hormiguero, Derek DelGaudio no presenta su magia en televisión, afirma que «nunca trabajo en un contexto donde no sienta que esté bien». Por ejemplo, estuvo invitado en el famoso programa de Stephen Colbert (quien también es productor del filme) y esto fue lo que pasó:
Algunos datos de In and Of Itself:
El show se presentó en vivo desde mayo 11 de 2016, hasta agosto 19 de 2018.
Comenzó con un contrato de 10 semanas y terminaron siendo 72.
Cuando el show estaba en el tope de popularidad, DelGaudio decidió ponerle fecha al final, afirma que «ya dije lo que quería decir».
Forbes lo incluyó en la lista de espectáculos que más dinero generaron, haciendo más de cinco millones de dólares en 2018.
Al inicio del show DelGaudio dice «5 years ago I was in Spain visiting a friend», ese amigo es Luis Piedrahita.
Por favor véanse In and Of Itself, está disponible en iTunes y en Hulu a partir del 22 de enero.
Si ya lo vieron, o estuvieron en la experiencia en vivo, por favor dejen un comentario.
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