Lo mejor de la publicación del libro David Copperfield History of Magic es que el legendario ilusionista lo ha promocionado concediendo entrevistas en canales de televisión, podcasts y medios escritos. Escuchar a Copperfield hablar de magia es un lujo, siempre hay algo que aprender.
Y en este caso se refirió a un tema que pocas veces ha tocado: la ética en la magia.
Sucedió en el podcast de Vanishing Inc. donde charlan del libro junto al co-autor, Richard Wiseman. Hacen un recorrido por todo el libro, contando anécdotas, historias y curiosidades, la entrevista es muy interesante, pero una de las respuestas que más llamó la atención es cuando el host, Damian Jennings, les preguntó o siguiente:
¿Crees que el plagio va a terminar algún día, vamos a tener algún grado de integridad?
«No lo creo» afirmó Copperfield, «En magia el público no sabe si eres bueno o no».
«La baraja invisible es un truco increíble, pero para presentarlo no necesitas habilidad ni talento. Lo haces y la gente dice -wow, eso es mejor que… Derren Brown – quien es alguien que trabaja muy duro. Esa es la parte menos afortunada de nuestro mundo» complementó.
Y entramos al tema del plagio según Copperfield: «Al contrario de la música, el público no sabe si el mago robó algo… también sucede en comedia, un comediante no puede robarse las lineas de otro, además sabe si lo que dice es gracioso».
Pero no todo es oscuro, hay algo positivo siempre: «Algo bueno de la magia lo bueno es que generas reacciones positivas muy rápido, y eso debe motivar a las personas para trabajar en pulir su talento para el futuro» puntualizó.
Copperfield también copió: «Todos comenzamos copiando, emulando a otros, en mi caso veía a Richiardi, quería moverme como él, y apestaba. Pero en un momento debemos parar de copiar y comenzar a buscar nuestra propia voz. En mi caso trabajo muy duro con nuevas tecnologías, para que la gente las use en el futuro. Me copian y me molesta, pero por suerte siempre sigo para adelante».
Richard Wiseman tomó la palabra e hizo un aporte muy interesante: «Trabajas muy duro, cometes muchos errores en el camino hasta que consigues un buen producto final. Los magos pueden elegir en tomar el camino duro o robar el trabajo hizo otro. Si eres perezoso y no tienes integridad, adivina cuál será tu elección. Además, nunca serás auténtico, porque tu no lo creaste, siempre serás una copia de otro en vez de ser tu mismo. Y la audiencia de alguna forma percibe tanto la falta de autenticidad como el trabajo original.»
(Paréntesis para recordarles consultar la teoría de los siete velos misteriosos de Juan Tamariz)
Copperfield continuó hablando al respecto: «La magia tiene muchas bandas de covers… La audiencia le da una especie de droga al mago cuando le dice ‘eres increíble, eres el mejor’, y tu te lo crees, es muy bizarro. Eso no pasa en la música».
Y ahora pone un ejemplo concreto del plagio a su material: «Hay alguien en España que hace mi show: lo del dinosaurio, las manillas, la nieve, la moto… hace todo mi material. Es un gran show, ¡pero es mi show! Mi espectáculo fue malo por un tiempo, tuve que trabajar para mejorarlo, él robó la parte buena. Es muy bizarro… ¡y tiene éxito!
¿Te imaginas si viene a Broadway, amenaza en venir, y presenta West Side Story como East Side Story con las mismas canciones? No se sale con la suya.»
¿A quién se refiere? Ni idea, sigamos.
Finalizó recordando que Houdini coleccionaba afiches de otros magos haciendo su escape del bidón de leche y el hecho que Horace Goldin pasó toda su carrera intentando parar que le copien su material.
Y concluyó con lo siguiente: «Esto no va a parar porque el público va a seguir drogando a los magos con elogios y ellos creyéndoselos. La solución es dejar pasar, valorar todo el trabajo duro hecho durante el proceso y seguir adelante.»
Pueden ver toda la entrevista a continuación:
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